Un aguacero sin precedentes azotó el noreste de la República Popular China entre los pasados días 19 y 20 de agosto, causando el desbordamiento de varios ríos de la zona. Este temporal también causó daños a la zona noreste de la República Democrática Popular de Corea.
Llegó un momento en el que cayeron 5.300 metros cúbicos de agua por segundo en el río Amnok, procedentes de otro río situado en China. Esto provocó la crecida del río, que inundó la ciudad de Sinuiju. Tanto el flujo del tráfico como los objetos de la ciudad quedaron anegados.
Los núcleos de población más afectados han sido Sangdan-ri, Hadan-ri, Taji-ri y Soho-ri en el Condado de Uiju, así como las isletas de Ojok y Maksa dentro de la ciudad de Sinuiju. Todas estas localidades quedaron completamente sumergidas.
Las víctimas de estas inundaciones se apresuraron a buscar refugio en los tejados de los edificios y en las colinas cercanas.
Las instituciones tomaron medidas de emergencia para rescatar a las víctimas al enterarse de la situación de la zona, pero la gravedad es tal que poco pudieron hacer. Tras esto, el Secretario General Kim Jong Il ordenó al Ejército Popular que iniciase inmediatamente las operaciones de rescate.
Las fuerzas aéreas enviaron docenas de aviones y buques de guerra de la Armada, así como diversos tipos de unidades militares, logrando con éxito la evacuación de al menos 5.150 personas hacia zonas seguras, donde permanecen en contacto permanente con los funcionarios del Partido, de los órganos del poder y de la seguridad.
Los habitantes de las áreas afectadas por las inundaciones y los voluntarios movilizados para las operaciones de rescate señalaron emotivamente que el sistema socialista vigente en la Corea Popular es el que más ventajas sociales tiene y el más benévolo para con las vidas y propiedades de las víctimas, dejando bien claro que Kim Jong Il es el gran padre de estas tierras y una bendición para el Pueblo.
Corea Socialista
Fuente: Agencia Central de Noticias de la RPDC (KCNA).