Los reaccionarios japoneses han organizado en Tokio una exposición titulada "Mar del Japón - islas que debemos defender" para insistir en la soberanía sobre el islote de Tok.
Los japoneses exponen allí un mapa en relieve y liso del islote de Tok, e incluso licencias de viaje al islote, lo que muestra la infinita ambición territorial del país insular.
Lo cuestionable es que Japón dice abiertamente que esta exposición es para dar al pueblo japonés la noción de el territorio existe.
Hace poco, los reaccionarios japoneses protestaron por el vuelo de prueba sobre el islote de Tok de un avión de pasajeros del Sur de Corea, tomaron las medidas de prohibición de uso del avión surcoreano de los funcionarios japoneses e intentaron organizar la visita de parlamentarios del Partido Liberal Democrático (partido gobernante en Japón) a la isla de Ullung.
Al ocupar el islote de Tok, los reaccionarios japoneses persiguen su utilización como trampolín para agredir de nuevo a la RPDC y a los demás países asiáticos, monopolizando la concesión económica de los recursos marítimos y submarinos de su entorno.
Para este fin, inculcan de manera sistemática a jóvenes y niños japoneses la conciencia de arrebatar a la RPDC el islote de Tok, para muestra, la presente exposición.
Histórica, geográficamente y por la Ley Internacional, la campaña que los reaccionarios japoneses hacen sobre el islote de Tok, territorio tradicional de la nación coreana, es una grosera violación a la soberanía de Corea.
A medida que Japón muestra su ambición expansionista en momentos tan duros para su pueblo como los desencadenados tras el desastre de Fukushima solo se demostrará la naturaleza agresiva del imperialismo japonés.
El país insular no debe olvidarse de la lección que supuso su amarga derrota en el pasado y abandonar las ambiciones expansionistas sobre Corea y sobre cualquier país del mundo.
